Nutrición/Dieta y la Prevención del Cáncer
La relación entre la dieta y el cáncer tiene dos aspectos fundamentales a tener en cuenta:
La dieta como preventiva del cáncer, que son los alimentos que hemos de incluir en nuestra dieta.
La dieta como precursora del cáncer, que son los alimentos que hemos de moderar o eliminar de nuestra dieta.
El World Cancer Research Fund (WCRF) y el American Institute for Cancer Research (AICR) publicaron en 1982 sus primeras investigaciones acerca de la relación entre la dieta y el cáncer, a las que siguieron en 1997 la publicación del primer informe Alimentos, nutrición, actividad física y la prevención del cáncer: una perspectiva mundial y más adelante en 2007 el segundo informe del mismo título.
> Ver informe íntegro pdf (inglés)
> Ver resumen del informe pdf (castellano)
Este informe es una referencia mundial en este campo y estima que seguir una serie de hábitos alimenticios recomendados puede reducir la incidencia global del cáncer entre un 30% y un 40% lo que son entre 3 y 4 millones de casos anuales en todo el mundo.
Si añadimos a estas cifras el dejar de fumar, supone que entre el 60% y el 70% de los cánceres son evitables
Relación entre Alimentos y el Cáncer
El informe relaciona alimentos, bebidas, nutrientes, métodos de transformación, conservación alimentaria, tamaño corporal y nivel de actividad física con cada uno de los 18 cánceres más comunes calificando esta relación (tanto para los factores que aumentan el riesgo como los que lo disminuyen) como convincente, probable o posible.
Por ejemplo, las verduras reducen el riesgo de los cánceres:
Convincente → boca y faringe, esófago, pulmón, estómago, colon y recto.
Probable → laringe, páncreas, mama y vejiga.
Posible → hígado, ovario, endometrio, cuello del útero, próstata, tiroides y riñón.
Las frutas reducen el riesgo de los cánceres:
Convincente → boca y faringe, esófago, pulmón y estómago
Probable → laringe, páncreas, mama y vejiga
Posible → ovario, endometrio, cuello del útero y tiroides
Por el contrario el alcohol, la carne, las dietas grasas y la obesidad incrementan el riesgo de diferentes cánceres. La carne, por ejemplo, aumenta el riesgo de cáncer colorectal de manera probable y de los cánceres de páncreas, mama, próstata y riñón de manera posible.
> Ver tabla completa pdf páginas 8 y 9
Recomendaciones
Del informe se pueden extraer 10 recomendaciones dietéticas principales para la prevención del cáncer:
Elegir dietas basadas predominantemente en vegetales, ricas en variedad de verduras y frutas, legumbres y alimentos almidonados mínimamente refinados.
Comer diariamente como mínimo 400 gramos de verduras y frutas variadas, durante todo el año.
Comer cereales (granos) y leguminosas (legumbres) relativamente sin elaborar con cada comida.
Elegir alimentos mínimamente procesados.
Limitar el consumo de azúcar refinado.
Limitar las bebidas alcohólicas, si no del todo, a menos de dos bebidas al día para los hombres y una para las mujeres.
Limitar el consumo de carne roja, si no del todo, a una cantidad máxima de 80 gramos por día.
Limitar el consumo de alimentos grasos, especialmente aquellos de origen animal.
Limitar el consumo de alimentos salados y el uso de la sal en la cocina y en la mesa.
Mantener un peso corporal razonable.
También se recomienda:
Hacer como mínimo una actividad física moderada, como caminar rápido o un ejercicio similar, 30 minutos al día.
No fumar ni mascar tabaco.
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